el gremio de maquinistas sale a la luz del día a la voz unánime de "somos buenos". Que nadie ponga en duda la profesionalidad del sector ferroviario. Dar confianza a la ciudadanía es esencial en las fechas que estamos y con el ánimo de no tropezar con la misma piedra del despiste, con la que tropezó Francisco José Garzón.
Yo me imagino que las estaciones de tren serán un hervidero de reuniones y comentarios de los demás conductores. Imagino que habrá quién le parezca mentira lo sucedido, como al que se repita mentalmente: esto yo me lo veía venir.
Es muy posible que los conductores que hayan hecho la línea en varias ocasiones, les hubiera dado la idea de traspasar su responsabilidad y decir a los jefes del FCC: aquí, en esta curva, algún día pasará algo. Y es muy posible que no lo hayan hecho porque los de abajo no dan clase a los de arriba. Y así nos va.
Yo, desde este otero, os deseo felices vacaciones a todos aquellos que entráis y salís de este, vuestro blog.
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