lunes, 3 de junio de 2024

pongámonos al día

 
como dice el vídeo: China intenta invadir Taiwán.
Ahora sería el momento práctico para que las feminazis socialistas se pongan a bailotear por las calles españolas contra el imperialismo taiwanés. Porque aquí el que es malo malo son los taiwaneses. ¡Dónde va a parar! Xi Jinping es una hermanita de la caridad que solo quiere ayudar a Taiwán desde las entrañas de las empresas taiwanesas. Es decir: China intenta conquistar los cinco continentes para familiarizarse con el planeta. Para cuando bajen los extraterrestres sea Jinping quien salga a saludarles. Un continente que parece calcado de algún mundo en otra dimensión. Ni los animales en África están o son tan esclavos como los chinos. Ese es el mundo que quieren los comunistas: <<"gobernar como pastores a las ovejas">>.
Pues aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladoliz, es cuestión de ir aprovechando los motivos suficientes para empezar otra guerra para arrastral al mundo a un conflicto internacional.
Si Israel y Palestina están en conflicto bélico... por qué no lo va a estar China contra Taiwán. Y Rusia contra Europa. Y las mujeres contra los hombres. Es el momento apropiado para una guerra generalizada.
Pero sin duda que las féminas no se van a poner en contra de China que es un régimen comunista como el que quiere implantar Sánchez, en España. ¡Entre bomberos no se pisan manguera!
¿Realmente la sociedad mundial está diotizada en su generalidad?
Pues creo que sí. 
Cuando alguien manda a la juventud a matarse y ésta va... es que la cosa no pinta bien. No hay ningún hijo de p... político que le manden a la guerra. A morir por la patria china o grande. O que vayan los políticos que las provocan. Las guerras son para los políticos: Ellos las crían y ellos las disfrutan en el campo de batalla. ¡Qué es eso de mandar a los demás a morir por su idea cobarde!
Qué manada de trapecistas tenemos en los políticos. Aquí es donde se han nivelado las mujeres y los hombres: en la tontez más elegante jamás visionada. Pero se encuentran tan contentos y tan majestuosos a la hora de presentarse ante los demás. 
Los cobardes ante las cámaras. 
¡Qué ejemplo de inutilidad la suya!

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