y no la dejaban parir. Pues ya ha dado a luz, la abuela del CGPJ, gracias a la ayuda de González Pons y Félix Bolaños. Dos médicos de cabecera que se han sentido muy orgullosos de ser los responsables del histórico y feliz acontecimiento.
Nunca antes había visto tanto jolgorio y vaselina como se ha visto entre Pons y Bolaños, (PP-Psoe). Es más, me da la sensación de que Bolaños tiene esa sonrisita de habernos engañado a los ciudadanos con ese apretón de manos masónico.
Si de algo no pueden engañarnos es sobre la hipocresía que se gastan jugando al Monopoly. Un juego político donde las figuras son reales. Como reales los efectos que producen las consecuencias de fallos provocados por inservibles individuos con menos mente que la de un mosquito. Pero ahí están, jugando con la vida de millones de españoles que les importamos un pimiento. Si no fuera así... habrían realizado la maniobra de reanimación del Poder Judicial mucho antes y sin tanto boato y jubileo. Lo que nos lleva a pensar que la política tiene los tempos marcados y se ajustan a ellos para el fin determinado.
Han llegado los vencejos a nuestros cieles españoles y, con ellos, un nuevo comienzo de temporada de renovaciones que no dejan de ser lo mismo pero con diferentes caretos.
Espero que el nuevo comienzo de temporada política nos aporte entregas más sofisticadas y mejor remuneradas.
¡Qué tremenda plasta de vaca representa nuestro Parlamento representativo españo! ¡Qué desgracia más grande nos está tocando vivir después de tantos sufrimientos y carencias!
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