que los medios mediáticos se enfrentaran o retransmitieran los errores cometidos por los dignatarios de Cristo. ¡Ay si éste levantara la cabeza! Imagino cogería una cuerda de pita y haría correr del templo a todos los miresables corruptos que lo integran.
Yo estudié para cura, en Palencia, en un internado, y jamás pude imaginar que nos tratarían peor que en el servicio militar. La vocación tenida desde niño, me la zarandearon de forma brutal, sin embargo en mi interior nunca les desee mal alguno, tal vez, porque duré muy poco tiempo allí.
Sin embargo, me cuesta creer que la Iglesia sea señalada por los mismos que descargaban en lágrimas, los asesinatos cometidos, en las cabinas de confesión.
La Iglesia se ha nutrido de mafiosos, camorristas, terroristas, asesinos, pederastas, y de las aportaciones que estos hacían para redimir las culpas. Esta institución, jamás ha representado los verdaderos valores morales que el individuo representa. Este club ha invertido tiempo y dinero en tener lo que tiene en posesiones, a cuyo dios menor, ha rendido pleitesía. Pero esto ya lo sabían nuestros antepasados. Aún, en los pueblos, siendo más analfabetos, los parroquianos huían de ellos como de la peste. Pero a los curas les daba igual, porque con quienes se relacionaban era con quienes tenían haberes y les daban de comer y beber gratis, con el resto... sólo la extremaunción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario