jueves, 31 de mayo de 2012

lo que pudo pasar...

Hace alrededor de 15.000 años que guerreros del Universo se repartían los tesoros de aquellos planetas, como el nuestro, que les servían de almacen de materias primas. Llegaban, cargaban, guerreaban con otros como ellos y cada uno se marchaba a su casa si ganaba, o, se quedaba en la Tierra contra su voluntad y a expensas que otros volvieran por ellos. Algo parecido a ETE. Es muy posible que las pirámides sirvieran como señas de identidad a otras entidades y como símbolos de poder ante los terrícolas. ¿Qué pudo pasar para que los terrícolas confiaran en aquellos seres? En primer lugar su fisonomía: ahuevadas cabezas por medio de alarga cráneos. cuellos de jirafa y pedrerías de diferentes planetas del sistema solar. En segundo lugar, aquellas naves enormes despidiendo chorros de energía. En tercer lugar los regalos de varas o bastones que despedían luz y calor Y, lo más importante, los viajes dados a los jefes de las diferentes tribus terrestres, con la finalidad de conocimiento del medio habitado y sin habitar, visto desde las nubes del planeta. Puede que sean puntos más que suficientes, y que pueden haber más, para que los pobres terrícolas confiaran y se aliaran con aquellos individuos ataviados a la manera de los policías terrestres actuales.

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