que pantalón bajado. Como véis en la foto, Obama, alias el Tostao, tiende la mano abierta al Rey español Felipín. Lo de la mano abierta no sé si es para pedirnos algo a cambio de algo... lo cierto es que no me fío, y eran padre e hijo. El recibimiento ha sido rocambolesco para una nación que no sabe donde tienen la mano izquierda, cuando tienden la derecha. Es decir, los americanos nos confunden con algún país de sudamérica, y cuando les das un mapa para marcar dónde viven ellos... pues no lo saben. Esa es la América Imperialista. ¡Qué nos importa a nosotros saber dónde vivís si cuando levantamos la mano... se caga medio mundo! ¡Con un par! Y es verdad. Tan es así, que cuando quisieron los americanos un negro, lo tuvieron, y con un: Yes We Can. Todo un acontecimiento mundial, cuando el mundo sabía que, en norteamérica, los negros eran esclavos y la mano barata de los blancos, de aquel entonces. Y que el negro Obama era un polvo de uno de estos blancos, a una negrita, de aquel entonces. ¡Qué placer siento en sabiendo que somos primos hermanos de los árabes y de Obama! No entiendo como seguimos teniendo gente en España pasando hambre, con la cantidad que quitaron mandando leche en polvo a los colegios, en los años 50. Ahora bien, cargada con anticonceptivos para las niñas, de aquellos cincuenta.
miércoles, 16 de septiembre de 2015
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