y no han entendido nada. Esos hombres de color que se vienen a Europa como si fuera lo más de lo más. Vienen a ser subyugados, aquí, por el hombre blanco y las Ong´s, de mierda. Esas ONG dirigidas y manipuladas por la Iglesia y monitorizadas hacia una globalización jesuita. Los hombres no escarmentamos y pensamos que cuando nos dan una limosna es por amor al prójimo: una acción altruista. ¡Mierda!, ¿es altruista estar en la calle de aparca coches? ¿Es altruista estar corriendo en la playa delante de tres cuerpos de policía? ¿Se le llama altruismo tener a toda esta gente apiñada en edificios patera, antes de dejarles pulular por las calles sin orden ni concierto? ¿Es normal que la mafia de la Iglesia no esté controlada para acabar con esa lacra de la emigración? ¿Por qué le quieren cambiar el nombre de emigrante por refugiado? ¿Por qué quieren desestabilizar todo el planeta con esta masiva deriva de personas de un lugar a otro? ¿Por qué tienen que venir a tirar piedras contra la policía autónoma española, si no es para crear conflictos internos policiales?
Según las últimas cifras proporcionadas por
Frontex, 340.000 inmigrantes llegaron a Europa entre enero y julio de
este año, mientras que sólo en julio lo hicieron 107.500 personas, una
cifra que supera el flujo de personas que llegó en 2013.
La situación es especialmente “dramática”
en las islas griegas debido a su cercanía con Turquía, país de paso para
la población siria que huye de las agresiones de grupos de mercenarios
armados financiados desde hace 4 años por Estados Unidos, las monarquías
absolutistas árabes y algunos países europeos.
Aquí tenemos a los culpables de la deriva masiva de personas de unos países a otros: Estados Unidos, Monarquías absolutistas, y todos los hombres y mujeres G.
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