que los móviles pueden producir los mismos efectos en la cara que al maestro Yoda, y a que tengas que llevar un respirador craneal a modo del individuo que está detrás de él. Y no solo a éstos de la imagen les ha afectado la radiacción que emiten los susodichos teléfonos...sino a todos los extraterrestres por ser los fabricantes y primeros ideólogos del invento. Y, nosotros, como estamos deseosos de tener internet en todos nuestros hogares y fuera de él... resulta que los efectos perniciosos que nos acarrean son la de convertirte en yoda -gris pálido- o en canalizador de energías a través de la máscara que se gasta el Darth Vader. Que es tanto como practicarte una traqueotomía. Los estudiosos del tema ya han mandado las correspondientes misivas a los organismos civiles y militares: ONU, Organización Mundial de la Salud y Gobiernos, para que controlen los productos que generen campos electromagnéticos perniciosos para la salud. Pero... creo yo que caerá en saco roto, porque es tanto como preguntarle al presidente de España qué productos están esparciendo los aviones -los que no se estrellan-, sobre los cielos del planeta. Mariano no sabría decirte ni en qué día del mes y año está viviendo. Pues así con todos los organismos u organigramas que queramos presentar sobre los efectos que nos están minando las células cancerígenas. Estamos en el mayor apogeo de la historia del cáncer y eso que lo recuerdo de toda la vida. En fin, que los tiempos traen consigo este tipo de problemas y tendremos que ajustarnos a ellos, al margen de tenernos que revestir el cuerpo con algún que otro aislante térmico de lanas de roca proyectadas. Un mortero compuesto por partículas de lanas minerales de roca basáltica. Lo que haga falta con tal de tener el móvil o el televisor más uai de la historia de la tecnología.
martes, 12 de mayo de 2015
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