Como era previsible los reyes han vuelto a las pedanías donde la riada se ha cebado con los moradores.
Ahora sabemos quién era el que fallaba en la visita anterior.
Ahora sabemos hacia el lugar donde iba dirigida la hiel de los damnificados por su falta de respuesta a la tragedia: Sánchez.
Pedro, alias Antonio, era la diana donde los asqueados -por la riada- dirigieron su mirada y no, contra los reyes. Estos han sido aclamados, con vítores y alegría, a su paso por las casas y contornos de la riada.
Han prometido que no pararán de pasar por los pueblos para ir viendo cómo van las mejoras de reconstrucción de todo el paisaje devastado por las aguas.
Ahora sabemos que el monarca le ha echado huevos al asunto que era lo que le correspondía por la Jefatura del Estado. Si él deja a su pueblo ser saqueado por huestes pertenecientes al presidente de gobierno... vamos arreglados. Ahora sabe que debe recorrer España sin lacra a su alrededor. Porque, Sánchez, es una lacra para el monarca y para los españoles, en general. Hemos visto como no le aprecia nadie de lugar alguno. Todos le abucheamos y deseamos que se vaya a vivir a Marruecos si tanto le mola. Allá que el monarca marroquí le meta el sable que, al parecer, tanto le gusta al Guapo.
Venga, es hora de romper y empezar de nuevo sin los malditos zurdos, socialistas, que denigran la nación española. Y cuando decimos todos... queremos decir todos.
¡El Jefe del Estado toma las riendas ante la fuga de Sánchez al G20!
Ante la toma de decisión tomada por el Jefe del Estado..., Sánchez ha montado en cólera y le ha criticado la decisión. Ante el gesto, el monarca, ha montado en cólera, gracias a Dios, y le ha puesto las pilas. Don Felipe no tiene por qué tomarse la figura de Pedro, alias el Guapo, porque el presidente no creo que dure mucho en Moncloa. ¿Quién entrará? Pues no lo sé pero lo que sí sé es que Pedro, alias el Guapo, ha comprado todas las papeletas para que le toquen, desde la orquesta militar: La Marcha de Despedida. Creo que toda España tocará palmas mientras cruza el puente de plata, como un cobarde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario