Es inaudito que Mariano no escuche los reproches que le lanzan desde su partido y simpatizantes.
Es inaudito que, practicado el 155 descafeinado y la Chochín de Oro gobernando la Generalitat, se permitan los independentista tomar las calles, plazas y carreteras, sin que nadie remedie el entuerto.
No se pueden tener personas dentro de las cárceles castigadas por secesionistas, y que las calles sean bullicio de Mossos y simpatizantes en la causa común, y contraria a la ciudadanía española. Chochín de Oro y Mariano han sido y son cómplices necesarios, en la letanía catalana. No son aptos para llevar a cabo y buen puerto la Comunidad Catalana.
¿Para qué cojones se supone que está Santamaría presidiendo la Generalitat Catalana? ¿Para que la tomen por idiota y se meen en su puerta? Porque, no debe olvidar que, los que custodian dicha puerta son afines a Puigdemont. Y, sin embargo, se permiten el lujo de dejar fuera de control al memo de Trapero.
Hay cosas que un ciudadano normal no entiende ni dejan entender. Y, no lo entiende, porque es inconcebible para una mente normal registrar la información y cuadrarla con la acción. Son antagónicas. Dicen una cosa, hacen la contraria. Hacen una cosa, dicen otra.
Lo curioso es que a eso lo llaman política. Debe ser el juego del despiste. O, lo hacen con ánimo de que no puedas denunciarles por carecer de ética y moral hacia la ciudadanía. Derecho que se desprende de la Constitución del 78.
El problema principal está en la ciudadanía al desconocer los derechos y deberes que se desprende de esa Constitución. Y porque el gobierno actúa a salto de mata, y de este modo no puede funcionar un gobierno de derecho. Esto produce un vacío que es el que intentan rellenar los separatistas. En este caso, Maduro, ha practicado la bulimia para todo el mundo, y de seguro que gana a todos. Un método que practicaban los dominicos cuando separaban la paja del grano...--Dejar que fuera Dios quien eligiese a los suyos, de los otros... Todos muertos...
Este desequilibrio me crea una desazón tremenda. Porque captamos que se produce por egoísmo de ciertos poderes sobre una España en auge y próspera. Somos los vagos del mundo..., pero donde las cosas iban mejor que en otras partes, otros países, otros lugares. Todo ello nos lo quieren cambiar. Nos queman los montes; nos envidian por nuestra forma de vida; nos quieren separados; nos infravaloran con intención de desmotivarnos, desmoralizarnos, desmoronarnos; inseminarnos con el virus de la pobreza, la desgana, la carencia mental. No quieren que la juventud estudie y si lo hace, sea lo más parecido a Cataluña. Una geografía de España con carácter practicante de guerra civil.
Digamos ¡basta!, a todo aquél que no esté en consonancia con la vivencia armónica civil subsidiaria.
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