jueves, 30 de diciembre de 2021

hasta los huevos

 no creo que exista gente con más ganas de contagio que yo. 
Hace falta ser h.... de p... para habernos liado con esta lacra de virus y mentiras para acogotar a la población mundial que miramos como si lo que nos están haciendo fuera una fiesta de fin de año; para todos los hermanos, parientes y amigos, en un claro intento de que nos lo pasemos bien y no se nos olvide por nunca jamás.  Una fiesta que nos ha encerrado en lo más profundo de nuestra psique para que entendamos que los que gobiernan son [Ellos] y nosotros sus ovejas. [Su rebaño]. Y tan contentos con tener unos pastores que nos llevan al matadero sin puto remordimiento de conciencia. [Para eso somos su rebaño].
Este, por cierto, es el contenido de la agenda 2030: 
⨪El que llegue (después de la agresión) será todo un campeón y se le tratará como tal dejándole sin propiedad alguna que pueda considerar suya. 
⨪Será regularmente atendido de todo y le suministrarán de todo como si de una res se tratara.
⨪No comerá carne; pero se le suministrarán lombrices, gusanos, larvas de todos los coleópteros, porque son muy ricos en proteinas. Mientras [Ellos] se pegarán sus buenos chuletones de vacas fértiles y en buen estado de vacunación.
Todo esto parece un sueño... pero nada más lejos de la imaginación. Nos están enfermando e intentando mermar la cantidad y calidad de los seres humanos. Es impensable que unos humanos nos hayamos convertido en depredadores del resto. Que haya gente que piense que sobran humanos en el planeta cuando es todo lo contrario. A medida que la gente vaya muriendo por enfermedades, vejez, etc. la población del mundo quedará reducida a un planeta sin recursos. La Tierra envejecerá a la vez y quedará reducida a una bola yerma; muerta. Es increíble que haya gente que no tenga más que odio hacia el resto de sus congéneres. Me cuesta creerlo, aún, viéndolo.
amigos:
es triste la dureza de las imágenes que nos van enseñando como camino sin retorno. Una vez nos hayan encauzado hacia la derrota interna... ya no habrá retorno sin lucha. Y llevamos las de perder. Toda la tecnología está a su servicio para el control total del planeta, y cada uno de nosotros es un bicho a controlar. Y cada día que pasa, nuestro valor personal decae, por la inseguridad y el miedo al mañana. ¿Y qué será de nuestros hijos en manos de estos depredadores sexuales?

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