fuerzas manipuladas.

Han estado oscureciendo el cielo a base de fumigaciones, bajo la sospecha de  llamaradas solares, y ello ha traído consigo un incremento de la temperatura y la divulgación, nuevamente, del deshilo de los polos. Están consiguiendo, por el método Haarp, potenciar las tormentas hasta convertirlas en fuertes tornados que arrasen todo lo que se encuentren en su camino. Están moviendo la tierra hasta el extremo de fuertes terremotos, y están haciendo diluviar donde el nivel de lluvia era ínfimo. Están consiguiendo que el planeta se esté muriendo en determinados lugares; y cambios extremos, en otros. Toda una manipulación climática y experimentos cada vez más sofisticados de cómo convertirse en dioses planetario.