me llama poderosamente la atención observar cómo los ovnis se han integrado entre nuestra flota de aviones. No es la primera vez que opino sobre ello y no he encontrado a nadie que me lleve la contraria en la apreciación de que nuestros aviones necesitan de unas luces de posición y los ovnis también. ¿Por qué?, si estos pueden camuflarse cada vez que les dé la gana.
Nuestros ovnis llevan demasiado tiempo con nosotros y hasta diría que son nuestros ovnis. La cuestión es que nadie nos los ha presentado como posibles okupas en territorios elegidos sin la presencia constante de humanos. Igual hacen los míseros okupas de apartamentos, casas de campo, y otras propiedades a interesar.
Lo que menos me cuadra son las altas velocidades que pueden llegar a consumir con poco que el piloto pise el acelerador. 20.000 kilómetros en segundos es mucho si no está borracho el extraterrestre.
Hemos de prepararnos para cuando nos veamos rodeados de esos tipos altos y grises que parecen que andan buscando un planeta para llevarse algo a la boca. Y nos han encontrado gracias a que somos tan generosos que hacemos llamadas a los exoplanetas y a los demás okupas planetarios para que vengan a conquistarnos.
¡Cuánta gente vive de este fenómeno desde que a, alguien, le diera por decir que había sido abducido antes de reconocer, ante su señora, que había estado con el Tito Berni.
Me encanta saber que hay alguien ahí fuera que tiene unas ganas locas de hacer una obra de caridad salvándonos de los muchos peligros que acechan a los sufridos morados terrestres.
No he visto a nadie más concienciado a ser salvado que a los componentes de la iglesia del séptimo día. Pegándose están por ser uno de los 144.000 que será el número de los elegidos por Dios. No me digáis que no es una putada tirarse toda la vida pensando en que ha de venir El Último Día... para saber si eres uno de los ganadores en la Mente de Dios.
Pues así es como nos tratan los ovnináutas pensando en quienes o cuántos van a tener que salvar y dejar al resto padeciendo de la Gran Tribulación. ¡Una putada! Yo lo tengo claro...ovni salvador que abra la puerta... ¡ya estoy dentro! Y no me saca nadie ni con agua caliente.
Amigos,
tenemos aparatos que no sabemos que existen si no es en el conocimiento de las grandes potencias. Y, por desgracia, son más mortíferos que todos los artilugios que hemos tenido hasta ahora. Si todos ellos los utilizáramos para el bien... ya haría rato que estaríamos viviendo en otros planetas de nuestro sistema solar.
Que sepamos que estamos <solos> viviendo una odisea en el espacio.
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