no digáis que no es bonito

lo que pasa en esos países es que no están al loro de la llamada natural del coito. Que en Egipto hayan puesto el grito en el Cielo porque dos adolescentes hayan escalado una pirámide para hacer el amor donde antes lo hacían los reyes del lugar, no me parece escusa para que la líen parda por ese hecho. Es más, estoy casi seguro que podrían hacer otro turismo de pirámides diferente al convencional si antepusieran el referente: TURISMO SEXUAL EN EL CLIMAX DE LA PIRÁMIDE. 

¿No me digáis que no es bonito?

Ante todo porque sería un turismo joven, lleno de vida, capaz de escalar la pirámide sin echar el bocio, por la boca. Se gastarían una pasta en preservativos con la cara de los antiguos reyes egipcios impresa en ellos, que darían un aire de fiesta a las salinas aquellas.

Es evidente que el turismo senior se iba al carajo. ¡Algún que otro viejales haría el esfuerzo de izar la bandera en la plataforma piramidal de la cúspide, aún a riesgo de morir en el intento! Pero intentarlo, lo intentarían, seguro.

Es evidente que la gente busca nuevas formas, maneras y sensaciones de echar un polvo sin ser fotografiado por cámara alguna. El caso es que el satélite no para de pasar y pasar y plasmar detalles en cada una de su circunferencia terrestre. Ya hay que tener mucho cuidado dónde se hace uno sus cosas si intenta tener intimidad. Ya se ve que sobre una pirámide tampoco se tiene la cosa en secreto.

En fin, que les quiten lo bailado a esta pareja y que  vayan contando qué es aquello que se nota haciendo el amor sobre la batería energética que encierra la pirámide. Porque, amigos, la pirámide es una batería con carga suficiente para mantener la tierra en una bolsa cerrada o cáscara, donde nosotros somos los ratones que no podemos salir. Aseguraría que los satélites que dicen tenemos en el espacio exterior no están más allá de unos pocos cientos de kilómetros. Y siempre dentro de la atmósfera terrestre o infra estratosfera. 
¿Acaso hay algún planeta de nuestro sistema que tenga la bolsa de la que hablo?
Todos las fotos o imágenes que tenemos de otros planetas no están sujetos a esa atmósfera espesa producida y mantenida por energías de las que disponían las pirámides. Ahora son los HARP los responsables de seguir manteniendo la Tierra en una jaula, creada para mantener pajaritos. Jaula sin puerta de salida. El invento Tesla de los HARP fue reinventado después del apagón e inutilidad de las pirámides distribuidas por toda la corteza terrestre. Alguien ilustró a Tesla de cómo recoger energía del aura terrestre con la sana intención de que se beneficiara la entera humanidad. Lo que no sabía Tesla era que otra humanidad esperaba el invento para continuar alimentando el espacio exterior con la energía suficiente para sellar cualquier atisbo de salida del planeta. De este modo nos mantenemos dentro de una inadecuada capacidad de comprensión de los existenciales que nos hubieran dado la llave de apertura dimensional.
¿Qué llave? ¿De qué llave hablamos que nos haría libres?
De aquellas que mantenían en mano siempre los reyes del Alto y Bajo Egipto. Las llaves de las que están en poder -y que son copia- en manos de San Pedro. De esas y no otras, son las llaves, de las que hablo y no poseemos. Esas diferentes llaves que rasgaban el espacio tiempo, conduciendo a los poseedores hacia más allá de las estrellas, sin necesidad de ningún artilugio de ida y vuelta. ¿Por qué la Iglesia posee ese tipo de llave y hasta la estampó en la obra vaticana? 
Porque saben que es esa la llave que nos libera de la energía condensada que rodea la Tierra. Mientras no nos deshagamos de los HARP y pirámides que aún disparan rayos a la estratosfera, no tendremos armas suficientes para romper la red que circunda el planeta. La misma red que marcan las estelas chentrail, por los aviones responsables de la fumigación.