...difunto rey. ¡Quién te ha visto y quién te ve, andando por esos mundos de Dios y fragatas veraniegas! Si te vieras, en tu estado -con lo que has sido- estoy seguro que no levantabas cabeza. El tiempo pasa y el desgaste ha sido mucho. El palo de la bandera ha estado siempre cara al sol, y eso a la larga deja huella en la vejez. Pero... ¡Qué te quiten lo bailao!, porque es verdad que has estado en muchos tablaos. Es ley de vida, aunque no se comprenda llegado el momento. La verdad es que alguien de tu entorno ha querido darte un escarmiento, porque de otra forma esa foto no hubiera trascendido tan ladinamente. Debes de tener algún enemigo o dos, dentro de la familia que se han compinchado para jugártela bien jugada. Bueno.
Tienes a toda la familia a tu alrededor y las nietas juegan a ser reinas. La vida pasa deprisa y pronto las veras sucumbir a la tentación de la Jefatura del Estado.
En fin
no puedo decir que me apena Su estado. Más bien me deja indiferente porque no ha sido más que una carga, y un pedrusco en el zapato. Y siempre seguirá siendo así hasta que Dios Le mande aparecer en Su presencia. Al haber sido Rey no creo le haga esperar mucho. No como otros que tenemos que hacer cola en todos los sitios.
Lo que sí me intriga es saber si en el Cielo hay elefantes: espero que no le de por empezar a disparar a todo bicho descarnado.
Yo, en su lugar, solicitaría -como los faraones- se enterraran con Ud. todos aquellos con los que ha tenido trato diario: cocineros, palanganeros, CNI, periodistas babosos y pelotas, familia... etc. etc. Hasta el Bribón, que le sirva de nave por las suaves brisas hasta el Señor. Así, en barca, subían los reyes egipcios hasta el cielo de Horus o Ra...
Camarada capitán, ahora verás que, muchos de los que se han arrodillado ante ti, se reirán de tu tullida pierna... Pero, ya, da igual.
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