Este bunker que vemos aquí no es de ahora. Lleva muchos años fabricado. Tantos años como inseguridad tiene la ciudadanía del mundo. Tan es así, que decidieron recopilar casi un millón de semillas y depositarlas dentro de esa montaña, con un clima adecuado para su almacenamiento y conservación. ¿Significa que lo hicieron por un motivo apocalíptico como intentan meternos en la cabeza algunos desinformadores? No. Se hizo con el propósito de acaparar la producción del mundo a modo de Mosanto. Que no es ni más ni menos que la Empresa Estatal Americana (OMC) con el propósito de acaparar el mercado alimenticio y que el resto del mundo tengamos que recurrir a ellos para podernos alimentar. Pero ésto tampoco es nuevo. Esta idea ha rondado desde que América del Norte se ha apropiado de la seguridad del mundo y mediante la idea de seguratas de ella, podernos defender de ellos mismos. ¡Yo creo la inseguridad para después hacerme dueño de la seguridad! ¡Somos los putos amos del mundo! Y el que no quiera estar con nosotros está -irreversiblemente- en contra. Pero... ay, para el que no esté con nosotros y no firme el tratado comercial.Porque le pasará lo que le pasó a Siria cuando le pedimos firmara y nos dijo que no. ¿Hemos parado de meternos con ellos? No. Y no lo haremos hasta que bajen la cerviz y... como perros mansos vengan a pedirnos firmar el tratado. Este tratado como otros muchos que vendrán son parecidos a la trama religiosa que...-una vez globalizada-, rezaréis por nuestros santos cojones. ¿Qué no venís a misa?, ya no hace falta porque Jesús y su madero se os aparecerá en los cielos en formato holográfico y os tendréis que arrodillar ante la imagen queráis o no. Pues bien, que sepamos que la globalización religiosa tampoco es algo nuevo; como tampoco es nuevo el formato de opresión religiosa del catolicismo hacia las demás demoledoras religiones del mundo. Porque me da en la cabeza que hay más cruzados entre los católicos que entre otras comunidades religiosas. Es decir, vencejos por número y mala hostia... y no... por amor global. Pues así está el mundo en que vivimos en la actualidad. Los picapiedra volverán, para seguir alimentando ideologías políticas, religiosas, armamentísticas, puteriles y demás zarandajas. La Tierra no tiene un ADN tan obstuso, pero solo lo saben aquellos que están sacando provecho de haberlo sabido con tiempo. El conocimiento es poder y da alas evolutivas a las mentes individuales.
viernes, 2 de diciembre de 2016
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario