fueron capaces de creerse las imágenes que nos mostraron del lanzamiento del Apolo 11, de julio del 69, camino de la Luna. 400.000 kilómetros,más, menos, del planeta que orbita.
En este vídeo nos dan los testimonios de personas afines a este tipo de lanzamientos, procesos, oponiones, que surgen de las bocas de los implicados astronautas.
En el 69, estando junto a mi abuelo viendo, por tv, el lanzamiento en blanco y negro... el viejo me vino a decir que no era verdad lo que estábamos viendo. Él tenía el conocimiento y yo la inocencia de un chaval de 14 años. En esa época los chavales nos lo creíamos todo. Tanto que luego hacíamos luces de neón y crónicas fantasiosas de cómo contactar con seres de otros mundos, dibujados y cronizados, en los cuentos de peques.
Hace ya tiempo que me he dado cuenta de que efectivamente las excursiones a la Luna no han sido más que meros espejismo fantasiosos de guionistas de ficción. Orson Wells nos hizo ver la realidad cuando en norteamérica metió a los ciudadanos la idea de que los extraterrestres habían conquistado la Tierra.
No cabe duda de que hay individuos que están por encima de un nivel normal y, ese pequeño salto de niveles, les convierte en supremacistas. Ideólogos que pueden conducir a los ciudadanos de rango inferior a creer en que los burros vuelan. Y se lo creen.
Ahora nos están movilizando a mirar hacia los años 50 para que hagamos de los extraterrestres esos especímenes que nos controlan la mente, se alimentan de nuestras energías y nos visitan por las noches a jodernos la creatividad de la experiencia mantenida el día anterior.
Al igual que cuando era pequeño pensaba que los ciudadanos, los humanos, éramos terneros que mamábamos de las mismas ubres del saber general...; ahora pienso que estamos acondicionados desde el mismo útero de nuestra querida madre. Y, estamos condicionados, por una energía que rodea la tierra y, que, al igual que nos prohibe salir al espacio... nos razonaliza el ADN sin que mediemos en el asunto. ¿Quién manipula esa energía que consigue fusionar manipula nuestro poder intrínseco, y en favor, de qué.
Tal vez sea verdad que no podamos salir del planeta por esa espesa red energética que se retroalimenta del aura terrestre, o, de las pirámides que fueron el método energético más poderoso que hayamos podido visualizar. Hayamos podido encontrar. Pirámides con un alto poder de reflectación lumínica, hacia la epidermis del planeta.
Por tanto;
¿estámos condenados a vivir eternamente en este nivel triangular y polar terrestre?
Mucho me temo que sí.
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