De los dos mil millones de años hacia los 30.000, de antigüedad.
Conociendo esto no nos queda más remedio que echar la vista a un lado y pasar de largo. Por contra, tendríamos que renovar todo lo sabido y escrito hasta ahora, porque nada coincide con algo de lo que se va encontrando. El carbono 14 debería ser renovado para ajustarlo a las pruebas que se van acumulando en muchos lugares del planeta. Y objetos desempolvados.
Esta sería una vista del reactor nuclear más antiguo que se conoce. Es decir, que las estructuras de las pirámides que se levantan en todo el planeta pueden datar de hace dos mil millones de años o de 30.000. Cuando unos individuos levantaban las pirámides de Egipto, por ejemplo, otros estaban en calzoncillos, pintando las cuevas y cazando con silex. Tal vez yo sea muy escéptico, pero las dataciones nos demuestran que han pasado por la Tierra multitud de seres con capacidades de hacer cosas, que nosotros hemos empezamos ahora. Y, por lo visto, con menos cualidades obtenidas. Todo un proceso que no se bien si es que estamos avanzando como sociedad nueva, o estamos degenerando hacia la última derivada.
Con las pruebas aportadas o encontradas, los científicos, se están haciendo la picha un lío para poder explicar, en lenguaje terrícola, cómo pudo ser posible la fisión de los isótopos nucleares del U235. Una fisión conseguida por efectos naturales, con influencia de agua totalmente limpia. Pero, que, para ello, se debieron dar nociones de una presencia, estimada en manipulación, humana.
La pregunta del millón sería ¿quién serían aquellos con capacidad para enriquecer isótopos en uranio enriquecido 235, destinados a reactores nucleares para producir electricidad, u objetos militares... entre otros...
El caso es que los egipcios nos enseñaron sus helicópteros, sus barcos sus pilas alcalinas... Productos de los que disponemos ahora. Vamos lentos, pero seguros..., eso espero.
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