ya hemos tratado el tema

pero me llama mucho la atención que sigan estudiando la vida, obras y milagros de aquél muchacho que se cargaron hace dos siglos y que encima, no coincida con nada o nadie de los que tenemos como prototipo. Algo no cuadra. Es verdad que a la Iglesia se la trae floja siempre y cuando vea ángeles, vírgenes y santos como los que salen en las pelis de Hollywood. Estos científicos se han cargado la belleza que otros han intentado difundir porque les cuadra mejor con el modelo de lo existente en el Cielo. Según, claro está, de la visión crística que tenga el haceedor de cuadros, imágenes y estátuas. En el Cielo,

estoy seguro, que caretos como el cristo representado no existe.Y si la cara de este Jesús es así cómo podemos imaginar la de su madre o la de su padre. No vamos a nombrar a José porque el pobre no tiene nada que ver con esta familia. Simplemente se le concedió la honra de la muchacha como sumo sacerdote que era. De aquellos entonces se han ido engrandeciendo las castas y dinastías hasta convertirlo en una cara y cuerpo de los años presentes. Más acordes con los moradores presentes que desfiguran menos los pormenores de las efigies mortales.
Conclusión: que a se han cargado de un plumazo toda la representación judeocristiana. Que nada concuerda con lo argumentado en libros, toras, biblias. Que nos han estado engañando conformo a fuero interno y monetario. Y que la gente sigue doblando su personalidad y viéndose a sí mismos clavados en ese madero del diablo y pidiendo prevendas que nunca tendrán. No me extraña, por tanto, que la Síndone no pertenezca a este Jesús, porque nada tiene que ver con él. No así con la cara de Leonado da Vinci.