la España de Franco.

De aquel señor bajito y rechoncho que tenía por esposa a una señora apodada: la collares. Y que sigue vivo en nuestra sociedad económica, después de que muriera en el 75.

La España de Franco nunca la hemos dejado. Este ideal de gobierno ha sido traído hasta nuestros día por un elenco de gobernantes y partidos con esas ideas sociales y de sociedad. Es algo parecido a Alemania con Hitler, del que nadie quiere acordarse pero que los mismos intentan conquistar el mundo a base de ajustes , batallas, económicos. 

Nadie ha dado, nunca, un duro por España y sin embargo todo el mundo ha y sigue intentando, apoderarse de ella o al menos saquearla. Franco se llevó oro, joyas y todo aquello que pudo conseguir y estos están haciendo un tanto de lo mismo. Zparo ha conseguido vender las reservas de oro al precio que le han querido pagar por ellas, de la misma forma que han vendido la deuda pública al precio que los chinos han querido comprarla. Toda una vergüenza nacional y sin nadie a quien poderle culpar de tamaño espolio. Eso si, seguiremos retransmitiendo fútbol; seguiremos sableando las arcas con el cuento del fútbol y repetiremos el eslogan de, yo soy español,  aunque piense que ni los futbolistas creen en España más allá de los 300.000 euros que se llevará cada uno de ellos al final de la contienda. Que sepa la plebe, que los demás países no han querido correr con el gasto adicional de primas multimillonarias y mira por donde España ( intervenida) e Italia (en camino) cargan con semejante gasto. ¿Hay alguien que lo comprenda? Yo no.
Al parecer y según fuentes, los jugadores y técnicos han llegado al acuerdo de tributar sus flamantes y relucientes cantidades astronómicas en Polónia, donde pagarán el 20% de esas primas, en impuestos,  mientras que en España  tributarían más del 50%.
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