A los Eméritos y otros familiares directos, anticorrupción les está investigando en lo de las tarjetas Black, del caso Bancaja; aunque, estos dineritos, provienen de allende nuestras fronteras, seguro, de cuentas llenadas por comisiones. Y algunos se pensarán que ese caso ya es viejo y está sub judice, pues, amigos, todo lo contrario. Hace escasos 2016 hacia acá, aún les llega, la Black, para sus holganzas familiares. Que conste, que, ni Felipe, ni Leti, ni las niñas, están metidos en estos líos de familia. Siempre ha sido Leti quien ha puesto puertas al campo de los campechanos eméritos. Lo curioso del caso está en que de los 65 millones que había traspasado Campechano a Corinna, no hay nada que rascar. Como mucho se les podría imputar algo sobre una miseria de cantidad, y tampoco prosperará por ser vos quien sois, aforado, y supeditado al Constitucional. A lo mejor, dicen, por la opacidad de las tarjetas se le podría meter mano a la emérita y al emérito. Otros Pujol, pero en casa pública. Hace falta ser memos y parecerlo. Aunque tontos, lo que se dice tontos: no hay ni uno en ninguna casa. Todos tiran al puterío y los dineros. Manda cojones.
martes, 3 de noviembre de 2020
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