Al parecer la decisión tomada por La Conferencia de Obispos Católicos de Australia, ha rechazado cumplir la ley que les obliga a denunciar a los curas pedófilos, si lo declaran en confesión.
Es evidente que a la Conferencia de Católicos Australianos les importa una mierda la víctima de abusos y su edad.
Es evidente, sería, que la Ley cumpliera con los requisitos legales que amparan al niño violado, y destierre de la Iglesia y del mundo a estos hijos de perra.
Queda claro
que estoy a favor del padre que enterado por su hijo que el cura al que le deja al cuidado...:se lo ha dañado impunemente. Su impunidad quedará entre el padre y la decisión que tome después de enterarse...
Ni curas ni pollas en vinagre.
Curato pedófilo le meto la polla en la boca después de arrancársela de cuajo.
De hijos de puta está la Iglesia llena y es hora que todos aquellos niños, hoy hombres, que han sido violados se tomen la justicia por su mano. Hoy pueden ponerse a la altura del pedófilo y pedirle explicaciones de su actuación. Y, proporcionalmente, meterle el hisopo (aspersorio de palo corto y un recipiente metálico agujereado en un extremo que se usa para esparcir el agua bendita) por su tronco cónico culo de enfermo mental.
De este modo proporcional violador-violado, se evitan tener que escuchar a la malvada curia del mundo mundial. Y a su fino Pastor, vestidito de blanco.
Aquí tenéis a los voceros de la Conferencia de Obispos Católicos Australianos. Al menos uno, se tapa la cara de vergüenza ante las cámaras. El otro es un seboso y cebado hijo de puta.
Aquí tenéis a los voceros de la Conferencia de Obispos Católicos Australianos. Al menos uno, se tapa la cara de vergüenza ante las cámaras. El otro es un seboso y cebado hijo de puta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario