la verdad que no dicen

los reyes magos de nuestros belenes son la representación sacerdotal que practicaban la magia y la demonología, cosa frecuente y conocida en el pasado. La escena de la Biblia representa, pues, que, en tiempos del nacimiento de Jesús, había brujos en muchos continentes pero, y este es el mensaje,  que se rindieron ante la supremacía del Niño Jesús al que reconocían como su Señor. Esto significa que, primero, la práctica del satanismo por brujos con poderes paranormales  están ligadas a la religión y, segundo, que las monarquías y el satanismo están unidos desde hace milenios. 
Se comenta cómo en los grupos de poder Masón e Iluminati, se practican todo tipo de aberraciones humanas.

¿Qué paso con la hermana de la reina Leticia? ¿Por qué morir después de la boda monástica?

Cuentan que, las obleas empleadas en la Ultima Cena, eran láminas de cerebro de personas con nivel intelectual alto. Se entendía la transmisión de inteligencia de ese cerebro al comensal.