que por nuestras ciudades se expanda el shariam-police-yihadistas, con la intención de ir reclutando simpatizantes jóvenes por nuestras ciudades ciudades, a la vez que impiden la voluntad de los musulmanes a imitar la vida normal en cualquier ciudad de Europa: tomarse una copita, o, ir a un bar a proveerse de cualquier cosa. Esta patrulla se ha autodenominado policía shariam. A mí me parece más bien denominarlos "tocapelotas". En Alemania les han prohibido deambular por las calles con esos uniformes, y han dado cancha a las patrullas locales para que estén ojo avizor por posibles altercados. En los protocolos de los sabios de sión está bien claro el comportamiento que han de tener estos individuos con el tiempo, cuando son acogidos por las administraciones de cualquier país. Una vez dentro, han de apoderarse de la justicia a base de tomar información fidedigna para ello. Un huevo de bíboras que eclosiona y empiezan a picar.
miércoles, 23 de noviembre de 2016
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