estas son las verdaderas imágenes que nos hemos encontrado cuando, los rovers, han pisado la cara amable de Marte. porque en la otra parte del planeta rojo está lleno de bares, tiendas de suvenirs, y burguers por doquier. Y no me extraña nada cuando nuestros pescadores tienen que faenar todos los días, siendo rivalizados con los ovnis. Esos aparatos que tienen una luz que atrae a las ballenas y las elevan hasta la nave. Grandes especímenes que no sabemos si se las comen o las están, marinadorizando, para llevar turismo terrícola hasta sus costas. Están de enhorabuena teniendo a medio planeta terrestre en el paro y el otro jubilado.
Grandes ciudades esperan a nuestros ciudadanos, con una gran carta de actividades que no serán capaces de realizar al completo. Estos ovninautas serán los "americanos" de los años 50, a los que con tanto frenesí les cantaban esperando recibir la lavadora, la nevera y otros utensilios de hogar.
Hace falta estar tan desesperados con los políticos que tenemos... para tirarnos en brazos de cualquiera que tenga huevos para venir a rescatarnos. Hasta este punto hemos llegado en el planeta verde, que no hay dios que quiera sentirse orgulloso de vivir en él.
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