viernes, 11 de marzo de 2016

dejadnos vivir, cojones.

¿Que la Gran Ramera, desaparece?Ya no hace falta que haya edificios donde la gente tenga que reunirse para escuchar la cantinela diaria de la palabra de Dios. El mismo Dios se presentará ante el pueblo como si desde el mismísimo Cielo bajará a reunirse con su feudo. Y, ¿por qué no?, si ya lo hizo en otro tiempo con Moisés, con Enoc, con Jacob... Lo detestable de esta aparición es que la figura elegida para que sea un dios creíble sale de una máquina en formato de holograma. Tan simple como eso. Y desde ese mismo instante en que aparezca la imagen del Creador, todo el mundo tendrá que bajar la cerviz para que nadie tenga necesidad de bajártela a base de palmadas cogoteras.  -Muy propias de los enseñantes públicos. También en los privados-.
Esta es la memez con la que quieren instrumentalizar a la plebe para que se convierta en un alma salva. Y, yo me pregunto, ¿qué cojones les importa a estos memos si morimos o vivimos o vamos al cielo o al infierno? ¡Si no te dan de comer!, ¿a qué carajo tienen que hacer semejantes estupidedes? Se lleva mucho. Eso de obligar a los demás a ser bueno -aparte de los beneficios-, tiene su aquél. Y mira que hay gente intentando doblegar a los demás a ser creyentes de algo que, ni siquiera los elegidos para el mensaje, comprenden o manejan. Pues esto es lo que se espera a partir de las nuevas tecnologías. Ya se han visto ciudades flotantes en diversas poblaciones de China.
The y se verán a individuos haciendo milagros y filigranas.
Project Blue Beam: Yes, the Gov’t Researched Projecting Holograms of God as a Mass PsyopY nos volverán locos con tanto memo suelto por los puntos cardinales del planeta. No me extraña que otras civilizaciones se hayan ido al garete manejando la mente de los individuos a lomos de aparatos nuevos. Todo..., menos hacer felices a la gente, y de no permitir que la felicidad sea vivida por la abundancia, y no, por la carencia. 


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