confirmación de la Santa Sede española

Dios creó a la mujer.., menos a Espe, a Cospedal, a Soraya y a Rita Barberá. Sienten  y opinan -desde la curia-, que hayan sido resultado de algún meteorito que pasara cerca de la Tierra, con la desgracia, de que, crecieran en España. Dios mismo ha dado a entender -a través del papa Franciscus-, que no tiene nada que ver con ese esperma venido de: vaya ud. a saber, -ha recalcado-,  y que tiene conmocionado a todos los ángeles que pululan por los cielos celestes. El arcángel Miguel está que los nervios se le llevan, porque ahora tiene un nuevo motivo para seguir dando espadazos contra los nuevos enemigos que traerán consigo dicho alumbramiento. El caso es que los cielos y las tierras están revolucionadas, y no digamos los yihadistas, que ven que alguien les quiere hacer competencia en eso de las creencias. Total, que estamos en un ¡ay!, contínuo y sin saber muy bien si algún nuevo meteorito que pase las vuelve a absorber y mandarlas a tomar por el culo al otro lado del firmamento. Pero de un firmamento que sea firme..., porque si no, es muy posible que con el tiempo y una caña, y un Darwin que las intentara  clasificar, retornarían a seguir dando por el culo a todo bicho viviente de posteriores milenios. Iker jiménez, está preparando una nueva andanada de capítulos para aquellos posibles encuentros en otras dimensiones. 

Ültimamente hay virus que se convierten en cualquier cosa, y todo, gracias a la putrefacción de algunas élites y sus adn. En cualquier caso, la Santa Madre de todas las religiones ha conectado con Gabriel, arcángel, quien ha manifestado que no volverá a decir a nadie que está embarazada por la gracia de Él... ¡ Paso, que se busquen a otro! -Ha dicho, tajante-.
 careto original de Espe, Cospedal, Soraya y Rita. Estos cuerpos han sido revestidos con una pátina de gelatina dándoles las apariencias que tienen en la actualidad. Cuando se excitan..., rompen el molde y chupan las sustancias químicas y energéticas de los humanos que se encuentran a su alrededor. Por ese motivo siempre van acompañados de tantos súbditos  a su ipnosis. Por eso, a la Rita, le gustan las féminas terrícolas.