miércoles, 7 de abril de 2010

Es el miedo lo que amarra...


...De pronto, en mi vi­dencia percibo ligado a uno de los contenedores a un espíritu repulsivo, de fisonomía vampírica, pues se movía sediento y absorbía los fluidos del puro que uno de ellos tenía en la boca... (anónimo)
“En verdad os digo, que todo cuanto ligareis sobre la tierra, será ligado en el cielo, y todo lo que desligareis en la tierra, será desligado en el cielo.” (Mateo, 18: 18.) Termina el anónimo.

Si esto lo pusieran en las cajetillas de tabaco, seguro estoy que mucha gente dejaría de fumar al instante.
"En verdad en verdad os digo, todo cuanto dejéis de vivir conscientemente en el momento que os toca de vigilia, será lo que tengáis que revivir de nuevo en nueva vida".(Lucas García).
Dejemos de meter miedo a diestro y siniestro.
Cierta vez conocí a un señor que daba conferencias de autorrealización. Debió hacer un buen pacto con la monjas del lugar, pues la conferencia la dió en un anfiteatro de la propia comunidad religiosa. Y digo esto porque el señor fumaba como un carretero, tal es así, que con uno que consumía encendía otro. Y para nada, digo, dejó de tener la sabiduría espiritual dentro, ni dejó de manar conocimiento con total fluidez.
El aura que desprende el cuerpo proveniente del espíritu no deja penetrar espíritus de fallecidos, por lo que las posesiones no existen como tales. Lo siento por aquellos cuyo tiempo lo dedican a sacar muertos de vivos.

No hay comentarios: