Inquieto ya lo vemos porque es el fundamento por el que el niño se cayó por un pozo. Una conjetura bastante justificada y justificable. El niño que no es inquieto y movidito es porque está enfermo. Y lo del fútbol me lleva a sublevar todas y cada una de las neuronas de mi gastado cerebro. Un buena forma de ganarse una estimable cantidad de simpatías, dado el numeroso seguimiento de forofos al mismo.
Julen era un niño normal de su edad pero en una finca ratonera. Es que lo mismo que decir que seguimos haciendo de nuestra capa un sayo a la hora de edificar, abrir zanjas, pozos y lo que no está escrito...
Lo curioso es que Julen quedara entre los escombros para reducir el nivel del pozo y los que tenía encima. Y si tenía tanta cantidad de tierra de desprendimiento, ¿Por qué han tardado tanto en sacarlo? Entendimos que era la roca de la montaña el principal impedimento que tenían las perforadoras por ser una roca muy dura. Y, ahora, resulta, que el niño iba tirando tierra a medida que iba bajando y sea la culpable del tremendo golpe en la cabeza.
¿Por qué no se hacen eco de la sustitución de la madre de Julen por la novia del padre, como comenta Josele?
¿No nos parece anormal la decisión tomada por los padres antes de la llegada de la Guardia Civil?
Hay cosas más importantes que determinar que en la definición chorra que hacen del niño.
Esperemos que todo salga a la luz y sepamos realmente qué le sucedió al infante. Las bonitas frases se las pueden meter en... Internet.
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