como presidentes de partidos y enfrentarse abiertamente como manda los cánones, me llena de una gran esperanza en el futuro de nuestro país.
Pero como en todas las cosas hay un pero...; me desagrada que esos personajes jóvenes sean manipulados como lo hace Aznar con el pequeño Casado.
Estoy seguro que Casado no dormirá tranquilo durante un tiempo pensando que "el Rey de la Tableta" le ha pasado la mano por el lomo; dándole confianza como alumno aventajado.
Espero, sinceramente, por el bien de los ciudadanos que el representante del PP no sea un doble del Tableta.
También es verdad que yo paso del PPSOE y de todos aquellos que están libando de la teta de la vaca. Porque veo que se van copiando los unos de los otros y el cambio solo se origina en la cara del nuevo..., el contenido es calco de sus antecesores. Casado se parece bastante a su padrino Aznar. Sin embargo prefiero la presencia de este joven, al memo de Rajoy.
Lo que no acabo de digerir es la presencia de Sánchez, la insistencia de Sánchez después de haber sido rechazado varias veces por los miembros de su partido.
Sánchez no cabe entre estos apasionados jóvenes con ansias de destacar y de vivir del escaño.
A Sánchez se le ha cogido con las manos en la masa y no basta con que diga que acaba de llegar. Veo muy bien que cualquier persona del país tenga la oportunidad de llegar a ser presidente del gobierno. Pero por egoísmo prefiero que el que ocupe el cargo tenga un mínimo de conocimiento y de preparación universitaria. Sánchez sabemos que no está preparado. Su único interés era llegar a presidente de gobierno y lo ha conseguido de malas artes y maneras. Así no te respeta nadie y, ni siquiera, los que te han encumbrado al Gobierno de la Nación, que ahora vuelven naves y se alejan de ti como gato escaldado.
El PSOE debe encontrar rápido un sustituto de Sánchez. Al PSOE no le interesa el lastre que lleva Pedro enganchado a su espalda, porque el lastre no es bueno. Y lo del doctorado le ha devuelto a la realidad, como una gran bofetada.
Creo que debe dimitir y donar su cargo, o, lo más sensato, convocar elecciones. Que sea el pueblo quien decida a quien queremos como Presidente electo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario