no hacía falta saber nada de este ser, para darnos cuenta de que su personalidad es, como la de Sánchez, de actores de teatro cutre. Vamos, como los actores que viven del cuento a base de mordidas a las arcas del Estado español. Que debería darles vergüenza vivir del cuento y del salario público que no se han ganado desde hace muchos, muchos años. Vaya, desde que los seguidores, si es que alguna vez los tuvieron, dejaran de comprar sus discos, y de interesarse por la vida de estos gandules de sábana blanca.
Ahora resulta que aquella que anda tras los empresarios ahogándoles con propuestas millonarias y despidos a porrillo... no tiene cerebro ni para saber qué estudios ha realizado y si ha hecho alguno. Es decir, no tiene cerebro ni para pasar el día. Es un Ente palurdo y falto de realidad mental, como de cerebro anquilosado como azulejo de váter: brillante por fuera pero ladrillo por dentro.
Ahora resulta que también nos estaba engañando con esa cara de <<mirada al horizonte sin saber qué mira.>>
Y no por arrugar la cara se mira mejor ni en Madrid ni en Galicia. Mira que supieron quitársela de encima cuando la deportaron fuera de la comunidad gallega.
Pues así está el patio dentro del psiquiátrico de la psoe. No hay ni uno que se vaya a curar de la mierda que tienen en la cabeza. Sería conveniente desterrar a la psoe de España a cualquiera de los países de donde están trayendo a tanto matón suelto.
Y, sobre todo, me encantaría ver a todos estos sinvergüenzas que viven de nuestros de nuestros impuestos a seguirles los pasos allá donde se la cascan los monos.
Adiós hijos de la gran puta. Me despido de vosotros esperando que la barca se desfunde lejos de nuestras costas. Que no hay un barco pirata oenegé que os pueda salvar.