domingo, 13 de diciembre de 2009

no me hagas caso, escúchate


yo fui gnóstico hace bastantes años. he visto a los fundadores en algunas ocasiones y me ha dado mucha alegría verlos porque eran personas muy entregadas al conocimiento de Samael Aun Weor. como en todas las sociedades que intentan ser abiertas al común de los mortales, más secretas se hacen, selectivas en número y personalidad. estoy en contra de cualquier grupo que se tome en serio una teoría en concreto, porque sin duda estará en contra de otra sin pensar que todo bajo el cielo y sobre la Tierra está creado y confeccionado. todo pertenece al mismo. apropiarse de esa migaja del pan redondo es absurdo, temerario y te aleja del centro, del corazón del total del pan. debo pensar que nada me pertenece y si pienso así, nada me sujetará en ningún lugar; seré libre del mundo y de mi, que es lo más importante; ponerme distancia a mi mismo para poderme ver. ¡no nos dejemos enjaular con ideas enjauladas que salen de mentes jaulas!

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