con la participación de la izquierda española.
Rodríguez Zapatero viviendo en Venezuela y apoyando al célebre Inmaduro.
¿Qué cojones hace Zapatero apoyando al memo del inmaduro? Pues porque Dios los cría y ellos, solitos, se juntan. Un individuo que gobernó España del modo que la gobernó... y ahora resulta que está dando clases de economía a países descerebrados. ¿Pero qué carajo descerebrados? Cuando vienen a España, esos benditos de Dios, resulta que son abogados, psicólogos, médicos, y encantados de haberse conocido. Hostias, pues no vengáis; quedaros en vuestros países y no imitéis a Zapatero.
El caso del pueblo español no tiene nombre. Mira que estamos dando vueltas a los presidentes de otras naciones... Mas, lo que tenemos en España, no tiene nombre. Y eso que han estudiado en el Opus Dei. ¡Mariano y Zapatero estudiando en los curas! Ahora entiendo lo de Zapatero y lo de Rajoy! Zapatero un descerebrado y Rajoy mariposón.
Me preguntaréis qué tiene que ver la versión española en este momento con el Nodo. Pues, amigos, tiene mucho que ver. La gran inversión de la Iglesia en España, nos ha puesto a los pies de los caballos de las legiones romanas. Y, poco a poco, nos daremos cuenta que de aquellos polvos, estos lodos. La Iglesia gobierna España a su antojo y cuestiona todo aquello que considera que no les va bien o perjudica. Y aquí estamos los memos españoles viendo como el Estado de Bienestar se va al carajo, y cada vez pagamos más y con menos conocimiento del por qué. Todo eso se lo debemos a los pollas mías de presidentes desde el listo de Felipe al memo del Rajoy. Espero que vayan tomando nota todos aquellos que hemos nombrado y siguen a Zapatero allende los mares para nunca más volver.
Y ahora nos preguntamos ¿por qué se van a sudamérica los ricos presidentes españoles? Porque tienen toda la pasta que nos han robado, en esos países latinos. ¿Cómo han conseguido sacarla del país sin abrir la cremallera del interés policial? La han sacado a modo de donativos a las mujeres perdidas en las cordilleras andinas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario