llega la calma-chicha. Las fallas han pasado con un rotundo éxito. Cientos de personas se han dado cita en Valencia y las calles y plazas estaban abarrotadas de un tránsito demencial. Personas de medio mundo se han venido a Valencia a ver lo que han considerado -desde hogueras de san Juan- en Patrimonio Cultural Mundial. Y, eso, ha sido lo suficiente para que la capital del Turia, vibrara de sentimientos a todos los niveles. Las falleras y falleros, por supuesto, por ver quemar lo que tanto les ha costado durante el año... y sin embargo, las fallas son como el Ave Fénix que se levanta de sus cenizas. Y cada vez que se levanta, conlleva otro sin número de sentimientos, trabajos, riqueza y cultura.
Es verdad que los únicos que se divierten son los falleros por ser los casales :casas cerradas, al público en general. También es verdad que ellos se lo curran todo el año, y vuelta a empezar.
Parece ser que el Alcalde ha estimado oportuno que la falla más importante de la capital sea una crítica al amigo Calatrava, al que tanto hemos criticado por sus construcciones de mierda y sin embargo, con la Ciudad de las Artes y las Ciencias, ha conseguido que Valencia tenga el río más caudaloso en recaudación y visitas. En fin, cada uno mira la mierda que en su letrina caga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario