se basa en el idioma con el que se ha estado comunicando siempre: el español.
Con este pensar el Papa ha dado una muestra de comprensión a todos aquellos que buscan en la historia algo con el que romper lazos que nos unen a los castellano hablantes. Más de 600 millones de individuos hablan español en el mundo. Un idioma que no es un susurro; sino un modelo de cultura de sol y humor. Calor y vida.
Alguien como Aquél, que, escogiendo a un pueblo, lo ensalzó por encima de los demás. Este no es el caso pero sí está entre los elegidos pueblos cristianos del mundo. Bienvenido a esta nuestra casa tanto de País como de Mente.
Debes saber que el anterior no quiso venir a España. Ni siquiera en los momentos más significativos de santos y santas devocionales, de tierras españolas. Tuvo la oportunidad y la desaprovechó. Esperemos que el papa León sí venga de visita a cualesquiera de los pueblos y ciudades que desee elegir. No se arrepentirá. Como tampoco lo hará en cualesquiera de los países hispanos.
Reconozcamos
que tiene una buena planta como ocupante de la silla de Pedro, y no se le adivina una prepotencia doctrinal.
Espero sea un puntal a la desaparición de las guerras en medio mundo y en el que puedan aparecer en el otro medio, también.
Ya va siendo hora que desde la aparición de un mesía predestinado a cambiar la mente de los humanos, hace 2000 años. Va siendo cuestión de que la paz sea duradera por el bien del planeta y sus moradores.
Nadie sale de este planeta si no por la muerte.
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