la alerta de la posible entrada de yihadistas en España es tan viable como que en Europa se empieza a hablar de ello y del descontrol que se vive dentro de la Unión. El buenismo -que nunca ha sido bueno- se está haciendo patente con gente que no merece ninguna intención de ayuda o recibimiento. Como bien dice VOX es completamente necesario que pongamos en ruta a su casa, a todos aquellos que han venido con intención de desestabilizar la convivencia en nuestros países. No hace falta nada más que utilizar a las oenegés, de mierda, que les han traído mediante un pago establecido, y ahora, tienen la ocasión de hacer de niñera en el retorno con sus pateras. Y si no, que lo haga Marlaska dirigiendo la huida con otra patera nodriza. Marlaska se puede quedar con ellos en sus países de mierda.
Vox confirma rotundamente que la alerta debe tomarse en consideración si queremos mantener una política social a como nos hemos venido desarrollando hasta este momento. En el que nos habían cogido -en el resto del mundo- como un país bueno para visitar y mejor para convivir. Los fundamentalistas no pueden convivir en ninguna parte... ni siquiera entre ellos mismos. Son violentos por naturaleza conviviente y perros ladrando en las montañas y oasis.
Echémosles fuera de nuestra querida España con todo lo que nos ha costado en vidas y sufrimientos haber llegado hasta el momento presente.
No podemos permitir que nadie nos descoloque el nivel de vida que llevamos, desvirtuando la convivencia entre nosotros. Antes era ETA la que nos sacaba de la norma y, ahora que estábamos teniendo un nivel bastante alto de poder adquisitivo y conviviente nos vienen todos estos sátrapas a rompernos lo -trabajosamente- consensuado.
Todos a una por la Unidad de España y los españoles.
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