lunes, 8 de mayo de 2017

debe ser maravilloso

vivir como los agentes secretos de las novelas negras; como si pertenecieras al PP o a la familia Pujol. En los SMS de la financiación del PP se mandaban códigos secretos tipo: ¿Tiene agua el cántaro? o "se oye el rumor del agua". En casa de los Pujol era la doña -como en las mafias italianas-, quien tenia el  nombre en clave: "soy la madre superiora", cuando tenía que trapichear con el dinero recaudado fraudulentamente. ¡Qué capacidad, señores, de vivir a salto de mata, pisando la cuerda por encima del precipicio! No como la gente normal, que nos introducen el alpiste en el bote y no venos mas allá de lo estrictamente pueril o justo para pasar el día. ¡No damos para más! En cambio, en las tripas del PPSOE y de los Pujol, de los Mas, de las Gürtel de los Eres... siempre pendientes dónde estará la  pasma, la UDEF.
¡Qué me hubiera gustado que mis padres me prepararan para una vida así, de aventuras y mucho dinero!
Ahí tenemos a los niños Pujol-Ferrusola, cargados de pasta desde la cuna. Hombres acostumbrados a codearse con todo tipo de matones, rateros, maleantes, curas y señoras abadesas, de ahí lo de "soy la madre superiora". ¡Cuánto van a poder enseñar en la cárcel! Entre estos y Mario Conde, nos van a salir finos los presos compañeros.
En fin, espero que los encierren una buena temporadita... aunque me gustaría más que devolvieran el monte de lo que se han llevado y no lo que están diciendo que tienen fuera. Ya estamos hartos de que nos engañen desde todas las estancias política y nunca nos enteremos de la realidad de los actos cometidos por estos memos del culo.

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