admite que Dios y Jesús no existen, ni existieron.
Y me viene a colación porque ,al padecer acufenos, me los mitiga el sonido de la radio. Y, de, este modo, la escucho al silencio de la noche. Pues bien. En ello estaba cuando sintonicé con una onda Fm y un análisis contertuliano de un sacerdote católico, un pastor adventista, un libre pensador y un medio, o, simpatizante budista. Saqué en claro que los adoctrinados hombres religiosos suelen tirar hacia su ideología, intentando disminuir la del contrario. ¡Y eso que beben de la misma Biblia! El sacerdote católico expuso una idea de Dios que, ni a Dios, contenta. El adventista es evidente que tiene que llevar la contraria al católico, -y la lleva-. Nada nuevo. Y el libre-pensador -más bien tirando a la ciencia-: opinó lo mismo que este joven y novicio sacerdote. Nada comparable a las frases u opiniones del papa Franc: -Si un amigo se metiera contra mi madre...-: -le sacudiría un puñetazo. "Lucifer es Dios". "La Iglesia no puede ser una ONG". La pobreza y la humildad son el centro del misterio... Todo esto no es más que una tomadura de pelo a los tontos creyentes.
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