Tanto el Papa Francisco, como Kim Jong Un, como Maduro, como Zapatero, como Berlusconi, Rajoy..., como tantos que han tomado la dirección de un país como garrapata en perro, han sido seleccionados como bufones de corte cortesana. Me parece de una memez desbordante la que derrochan estos individuos cara a los grupos o sectas de poder masón, iluminati y putrefacciones varias. Así es como se mandan de unos a otros las consignas que mantienen dentro de sus lugares de misas negras, ofrendas a no sé qué demonio inframundo, haciendo batir alas a las Torres Gemelas (que debió ser un subidón de adrenalina para el dios menor encarcelado), el 11 M, o las guerras sucesivas desde que la mente tiene memoria. No se puede permitir que las dirigentes civiles se tomen a guasa sus deberes y se comparen con el más allá sin tener encuenta el másacá. Lo dicho, son elegidos para hacer reir y no justicia. Además no son punto de reflejo o espejo para nadie que quiera ser un consumado o menor inteligente. Son intelectuales de doctrinas que a la larga les acorta su quebrantable personalidad.
¡Estos individuos no nos sirven para el beneficio que el pueblo llano demanda! No sé por qué los tenemos en el poder. No entiendo por qué les permitimos nos sigan machacando de está forma miserable.
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