martes, 25 de abril de 2017

el anticristo

anda sobre la Tierra: es un título que hace referencia al individuo que suele ir acompañando a Trump. Es un individuo con una notable personalidad, y hace gala de estar muy interesado en los comentarios que hace el Presi a la prensa. Es cuestionable lo que ese hombre tenga con Trump, si es un asesor seguro que dispone de todos los adjetivos para nombrarle Anticristo. Sin embargo, sobre la faz de la Tierra todos somos anticristos. Primero  porque estamos en el planeta que Dios dispuso para su antagónico Lucifer. Y si nosotros estamos viviendo en casa del demonio, es evidente, por tanto, que somos parte de su familia. Otra cosa es cómo hacer para salir de la influencia demoniaca en el caso de que, consideremos, que estamos endemoniados. También se dijo que el Papa era el anticristo, y tampoco erraba en apreciación, por sus palabras contra Jesús, El crucifijo invertido en la silla de Pedro, y la escenificación de los demonios queriendo salir del infierno en el cuadro trasero de la silla papal.Es evidente que la Iglesia no es de Dios. Es notorio que somos hijos del Leviatán. Que sería la Bestia creada por Dios. Lucifer es un ángel que se reveló contra la parte buena de su naturaleza divina, de Dios.

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