salimos menos del atolladero y nos lo hace pensar que desde los ocho años del gobierno anterior no han habido ideas ni individuales ni colectivas, que aminoren nuestro degradante sistema político, financiero, estadístico, etc. Por tanto debemos preguntarnos si la (ZE) nos va a tratar como a Irlanda o como a Chipre. Pues eso dependerá de la cantidad de chorizos que tengamos en España y de la cantidad (en euros) que esos chorizos nos hayan mangados a los españoles. Es decir, si la (ZE) tan pendiente de nuestros acuerdos comunitarios, ven con espanto como los euros que nos prestan son orientados hacia países fiscales y no pisan el país, pues nos tratarán como a Chipre, otro que como España, está cargado de mangantes varios y más actividades ilegales de lo pemitido. Sin embargo, ante el buen hacer de Irlanda, la ZE se ha quitado el sombrero y comprometido a que salga de la crisis y sirva de ejemplo a otros países como España, Grecia, Italia, etc.
Es necesario que los españoles tomemos las riendas de nuestro amado país y demostremos a la ZE que estamos dispuestos a seguir hasta el final si nos ayudan a encontrar todas las cuentas en las que nuestros chorizos gobernantes se la han llevado. De esta manera formal, España sería consecuente con los requisitos necesarios para que nos tomen en cuenta y volvamos a una estabilidad fuera de toda duda, como ha sido hasta ahora. Pero... ¿era necesario llegar hasta aquí para que Europa se haya dado cuenta de la crueldad de nuestros políticos hacia la ciudadanía en forma de impuestos inhumanos? No. Europa ha contribuido a que España esté en este garrote vil, desde neustra entrada en la CE. ¿A quién echamos la culpa? Tal vez la tengamos nosotros por haber dicho sí, cuando queríamos decir no.
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