lo digo a colación de las noticias de ciertos medios. Yo no sabía... ni siquiera lo imaginaba que hacer un crucero fuera -para ciertas personas-, un adiós al mundo de fiesta y algarabía. Lo curioso de las desapariciones en los barcos de recreo fuera más un peligro para aquellas señoras o señoritas hasta los 45, 50 años, que para otras. ¡Da la sensación de que el mar tiene una obsesión con las mujeres de estas edades! ¿Es posible que, Neptuno, esté buscando novia entre el pasaje de estos barcos de placer? ¿Cómo es posible, -me pregunto-, que desaparezcan ciertos miembros del pasaje y nadie los eche en falta? ¿Es posible? Según las noticias: sí. Por ello tengo que añadirme para denunciar estas anomalías y que las /los posibles viajeros tomen las medidas pertinentes dentro de camarotes y durante la travesía. Cuidado con las amistades que se puedan llegar a concertar, y estar ojo avizor cuando bajamos a la visita turística en el puerto correspondiente. Todo lo demás es pasarlo bien y disfrutar de aquellas fiestas que nos regala una tripulación bien preparada.
viernes, 30 de junio de 2017
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