aunque no imposible de predecir, que estos dos memos nos metan en una guerra mundial, por un quítame esas pajas. Que por desgracia no son pajas: es falta de inteligencia presidencial; es falta de equilibrio emocional y de psicopatía general. Verdad es que, los Bush, no eran almas de fiar... pero tenían un "no sé qué" que les hacía previsibles. Con este individuo, no. Este tonto y peligroso de Trump, no se le ve venir y te mantiene con el ¡ay!, en el cuerpo, y el culo prieto. Al pobre Kim Jon-Un, le faltan varios veranos y unos amigotes para lanzarse a la conquista del juego, con casamiento incluido, en las Vegas. Este chaval no tiene vida propia. Desde que se levanta hasta que se acuesta, tiene a su tía detrás dándole el coñazo con los juegos de guerra y el punto rojo del disparador rozándole las yemas de los dedos. Vive en un sin vivir y por ende, no es feliz. Todos sabemos que de este matrimonio entre Trump y Kim no van a salir cosas buenas. Y aquí estamos esperando que uno de los dos: el más memo, toque las campanas a arrebato. En fin, me parece imposible que estos lelos salgan de elecciones sin truco y votados por los ciudadanos. ¡¡¡IMPOSIBLE!!!
miércoles, 19 de abril de 2017
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