lunes, 22 de junio de 2020

¿Nos sorprende China?

No. 
China ya no sorprende a nadie, ni en lo referente al covid19.
En otro post ya dijimos que antes de crear el virus se fabricaba el antídoto. Y tan es así la aparición en las redes de tres vacunas -listas-: que China dispone para la fase 3. Chinas nos infecta; China nos salva a base de pasta gansa. ¡Qué buenos son los chinos de Xi Jinping!
¡Ya!
¡Qué jodidos, los chinos!
Han probado la manera (suave) de cargarse a media humanidad... con resultado satisfactorio. Ahora pueden poner a prueba la fase 3 teniendo las vacunas para los que elijan quedar vivos. Espero que ninguno de los políticos españoles tenga la suerte de tener o disponer de vacuna para salvarse.
Era normal que, para la implantación del Nuevo Orden Mundial, se haya fabricado el aliento del diablo: en formato de pandemia, que, junto con el observatorio denominado Lucifer... definen las intenciones diabólicas de la Iglesia de Satanás.
¿Cuántos curas han enfermado de coronavirus?
Creo que una monja contaminó a tres cucarachas. Hasta para eso les acompaña el diablo en sus fechorías.
El caso es que España está pendiente de un nuevo brote, y definitivo, de coronavirus 20. Y, hundimiento, de la  economía y la sociedad.
¡Dios nos coja confesados!

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