
Todo comienza con la creación, por un dios llamado Dios, de Adán y Eva en el Edén o Paraíso Terrenal. Este se ubicaba en la cima de una alta montaña, rodeado por un alto y frondoso follaje natural. En él, Adán y Eva tuvieron dos hijos: Caín y Abel. Cuando Caín mata a Abel, Adán y Eva se separan por un tiempo de tres años, tiempo en el que nace Seth, engendrado entre Eva y el Creador. Se dice que en la separación Eva vivía arriba y Adán abajo. Éste salía del Edén bajando una escalera practicada en la piedra natural, y traspasando una puerta de piedra rodada, vigilada por un ángel o seguidor del dios creador. Cuando vuelve Adán después de los tres años, comunica a Eva el mensaje de los habitantes exteriores de llegar a ser como el dios del Edén, por lo que ambos deciden llevar la contraria a las normas establecidas en el Paraíso. Dios se enoja y los arroja mandándoles con los externos. El dios creador y gobernador de los humanos externos, Satanás, les ha dotado de un fino velo catalizador de la energía que éstos generan al trabajar, la violencia y el sufrimiento; energía de la que se alimenta. Todo el caos de la creación ha sido una guerra entre dioses, teniendo a los humanos como el trofeo a conseguir, para ver quién de los dos y sus aliados se quedan con la tierra y el manjar: en energía, que los humanos producen. Como cutres vampiros en pos de su presa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario